Si, orgullo es lo que sentí viendo a nuestra selección de BA-LON-CES-TO, con mayúsculas, como le gusta a Pepu.
El partido de semifinales contra Grecia fue un partidazo, en el que los jugadores españoles demostraron el por qué son campeones del mundo y, a pesar de los errores en defensa, sacaron toda su raza y calidad para deleitarnos con uno de los mejores partidos del campeonato.
En la final, quizá se pagaron los esfuerzos del día anterior, pero volvieron a exhibir el espíritu y las ganas de ganar que, pese al mal partido realizado en ataque, siempre mantuvieron.
Al final la canasta no entró, pero eso es lo de menos...
El partido de semifinales contra Grecia fue un partidazo, en el que los jugadores españoles demostraron el por qué son campeones del mundo y, a pesar de los errores en defensa, sacaron toda su raza y calidad para deleitarnos con uno de los mejores partidos del campeonato.
En la final, quizá se pagaron los esfuerzos del día anterior, pero volvieron a exhibir el espíritu y las ganas de ganar que, pese al mal partido realizado en ataque, siempre mantuvieron.
Al final la canasta no entró, pero eso es lo de menos...
3 comentarios:
Felicidades juanfran por éste magnífico blog en el que espero que sigas poniendo muchas cosas para que podemos leer interesadamente!!!
No pudo ser...la gran asignatura pendiente la seguimos suspendiendo. Pero no por eso voy a poner verde ahora a la selección, cuando han protagonizado los partidos más interesantes del campeonato. Sólo alguna reflexión: ¿Era necesario "vaciarnos" tanto haciendo la preparación y moviéndonos como los turroneros por España? Quizás el cansancio hizo mella, pero a pesar de eso, sigo siendo una eñemaníaca.
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